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Los planes de pagos basados en acciones compensan con instrumentos de patrimonio o efectivo, siendo clave en sectores como FinTech para motivar empleados. Regulados por normativas específicas, su contabilidad depende de si la liquidación es en acciones o efectivo y las condiciones aplicadas, afectando significativamente los registros contables de la empresa.

Planes de pagos basados en acciones son planes de retribución en los que una empresa recibe bienes y servicios a cambio de sus propios instrumentos de patrimonio o de un importe en efectivo basado en el precio de sus propios instrumentos de patrimonio o instrumentos de patrimonio del mismo grupo al cual la empresa pertenece. El tipo de plan de pagos basados en acciones más habitual es ese a los empleados como premio por su servicio a la empresa.

Las normas que regulan estos tipos de transacciones son:

  • Norma Internacional de Información Financiera 2 “Pagos basados en acciones” si el marco financiero es NIIF y
  • Norma de Registro y Valoración 17 “Transacciones con pagos basados en instrumentos de patrimonio” si el marco financiero es el Plan General Contable aplicable en España.

Quedan fuera del alcance de dichas normas:

  • las transacciones relacionadas con las acciones emitidas en una combinación de negocios;
  • los contratos de compra de bienes que entran en el ámbito de aplicación de NIIF 9 Instrumentos financieros;
  • Transacciones con acciones propias, dividendos en la forma de acciones, emisión de acciones adicionales quedan, por tanto, fuera de su ámbito de aplicación.

Las industrias y sectores donde este tipo de transacciones son más habituales son las industrias de FinTech y Tecnología informática, start-ups, empresas con capital anglosajón cotizadas y otras. En estos sectores se suelen utilizar los planes de pagos basados en acciones como un incentivo a los empleados y como una herramienta para focalizar sus esfuerzos a los objetivos de la empresa. Eso se debe a que las empresas normalmente incluyen una o bien una combinación de varias condiciones que se deben conseguir antes de tener el derecho de estos instrumentos de patrimonio que pueden ser relacionados con el servicio de los empleados o su rendimiento (por ejemplo: permanencia en la empresa o/y el Grupo; cambio del control de la empresa; conseguir algún precio particular de sus propias acciones y otros). El tipo de condiciones y el periodo para conseguirlas tienen un impacto importante sobre el tratamiento contable.

Los tipos de planes de pagos basados en instrumentos de patrimonio según la manera de su liquidación se dividen en:

  • Liquidados en acciones/instrumentos de patrimonio (Equity-settled)
  • Liquidados en efectivo (Cash-Settled)
  • Con alternativas de liquidación.

La clasificación del tipo del plan es fundamental porque eso determina su tratamiento contable y el impacto en los registros contables de la empresa.

Reconocimiento de los pagos basados en acciones

Las normas contables aplicables exigen que se reconozca un activo por los bienes o un gasto por los servicios recibidos por una empresa. El asiento correspondiente en los registros contables será un pasivo o un aumento del patrimonio neto de la empresa, dependiendo de si la transacción se liquida en efectivo o en acciones (u otros instrumentos de patrimonio). Los bienes o servicios adquiridos en una transacción con pagos basados en acciones deben reconocerse cuando se reciben. En el caso de los bienes, se trata obviamente de la fecha en que esto ocurre (el cambio del control). Sin embargo, a menudo es más difícil determinar cuándo se reciben los servicios. Si el empleado/proveedor tiene derecho a las acciones en un momento inmediato (es decir no existen condiciones de irrevocabilidad), cabe suponer que se trata de una contraprestación por servicios prestados. En consecuencia, el gasto debe reconocerse inmediatamente.

Alternativamente, si las opciones sobre acciones se devengan en el futuro, entonces se asume que los instrumentos de patrimonio se refieren a servicios futuros y el reconocimiento se reparte, por tanto, a lo largo de ese periodo de irrevocabilidad.

Principios generales de reconocimiento – depende del tipo del plan:

Los planes de pagos basados en acciones liquidados en instrumentos de patrimonio:
El objetivo de las normas aplicables es determinar y reconocer los costes de compensación a lo largo del periodo en que se prestan los servicios. Por ejemplo, si una empresa concede opciones sobre acciones a sus empleados que sólo se devengarán en el futuro si siguen empleados, el proceso contable será el siguiente: El valor razonable de las opciones se calculará en la fecha de concesión de las mismas. Este valor razonable se imputará a resultados a lo largo del periodo de devengo, con ajustes en cada fecha contable para reflejar la mejor estimación del número de opciones que finalmente se devengarán.

Los fondos propios se incrementarán en un importe igual al cargo en la cuenta de pérdidas y ganancias. El cargo en la cuenta de pérdidas y ganancias refleja el número de opciones devengadas.
En este tipo de transacciones, el valor razonable del instrumento de patrimonio no se va a revaluar. Cualquier cambio por condiciones de mercado o de servicios, se reconoce en la cuenta de Pérdidas y Ganancias de la compañía.

El valor razonable debe basar en el precio de mercado siempre que sea posible. Muchos instrumentos de patrimonio no cotizan en un mercado activo, lo que representa otra dificultad de este tipo de transacciones. En este caso, se deben utilizar técnicas de valoración. Las normas contables aplicables no establecen qué modelo de valoración debe utilizarse, sino que describen los factores que deben tenerse en cuenta. Por ejemplo, requieren que el "valor intrínseco" sólo se debe utilizar cuando el valor razonable no pueda estimarse de forma fiable. El valor intrínseco es la diferencia entre el valor razonable de las acciones y el precio que la contraparte debe pagar por ellas.

Planes de pagos basados en acciones liquidadas en efectivo:
Para este tipo de pagos basados en acciones, la entidad valorará los bienes o servicios adquiridos y el pasivo en el que haya incurrido por el valor razonable del pasivo. Hasta que el pasivo sea liquidado, la entidad recalculará el valor razonable del pasivo al cierre de cada ejercicio sobre el que se informe, así como en la fecha de liquidación, reconociendo cualquier cambio en el valor razonable en la cuenta de Pérdidas y Ganancias de la compañía.

Por ejemplo, los “share appreciation rights”, que dan derecho a los empleados a pagos en efectivo equivalentes al incremento del precio de un determinado número de acciones de la empresa durante un periodo determinado. Esto crea un pasivo, y el coste reconocido se basa en el valor razonable del instrumento en la fecha del cierre del ejercicio. El valor razonable del pasivo se reevalúa en cada fecha de cierre del ejercicio hasta su liquidación.

En definitiva, los numerosos escenarios que pueden existir en los planes de pagos basados en acciones, los matices en las condiciones de los planes, el período de devengo, y los aspectos fiscales, requieren que este tipo de transacciones se revisen atentamente dado que pueden tener un impacto contable significativo.

Pavlin Nikolov

Gerente de Auditoría

Categoria

Auditoría General

Fuente: BDO

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