Auditoría & Co

Si usted ha llegado hasta este 2014, está de enhorabuena.  Pero sepa que aún debe tomar importantes decisiones para su empresa.  Decisiones de tipo estratégico relacionadas con reforzar o defender el posicionamiento en el mercado nacional, diversificación de productos en otros canales, ganar masa crítica, etc. y, en definitiva, generar sinergias comerciales, operativas o financieras en sus decisiones.

Numerosas multinacionales de varios sectores que disponen de buena financiación han fijado su punto de mira en España para realizar la adquisición de alguna empresa y bien posicionarse en la Península Ibérica o bien reforzar su presencia en Europa.  Esto es debido a una combinación de factores entre los que se encuentran las buenas expectativas, la capacidad exportadora de nuestro país y las buenas oportunidades de adquisición que existen en algunos sectores.

Lo peor de esta crisis puede haber pasado ya, pero numerosas empresas comienzan este 2014, con cifras de endeudamiento aún elevadas, con bajas exportaciones y estructuras de costes aún pesadas.  Lo que podría ser el inicio de la recuperación puede poner de manifiesto que numerosas empresas españolas llegan en una situación todavía anémica con estructuras aún frágiles.  Estos fundamentales, son el germen de una nueva ola de operaciones corporativas, muchas de ellas oportunistas pero otras tantas de carácter estratégico.

Desde el inicio de la crisis hasta hoy, se ha producido un período de autoeducación.  Los consumidores han aprendido a gestionar mejor su dinero, han tratado de reducir su deuda, ahorrar más y han creado un “fondo de emergencia” estable.  El consumidor, forma permanente, realiza este análisis para cualquier tipo de decisión.

Lo cierto es que la recesión parece haber influido en la forma de ver las operaciones corporativas…  En las empresas, ha pasado más o menos lo mismo.  Aquellos empresarios que se muestran preparados son aquellos que han reducido su deuda, aplicado además medidas de contención de gasto, aligerado sus estructuras operativas, aumentado la reinversión de beneficios en sus negocios y creado un pequeño fondo de cash...

Se ha pasado de un escenario de aprensión a otro de disposición, con menos desconfianza y mayor conocimiento de su grado de competencia.  Ahora, este empresario busca oportunidades de inversión que refuercen o defiendan su posicionamiento en el mercado.

El mayor problema que tiene el empresario en el 2014 es relajarse y no estar alerta ante las oportunidades que se le presenten.  Hoy se debe ser proactivo en la búsqueda de operaciones corporativas, plantear escenarios estratégicos a otras empresas del sector para crecer por medio de alianzas, reforzando financieramente y especializando operativamente la entidad resultante… se debe utilizar ese cash que ha reservado en los últimos años para dar un giro a su posicionamiento, reforzarse y crecer en sus ventas.

Si no quiere acabar el 2014 como el año del consumismo, con-su-mismo mercado, con-su-mismo tamaño, con-su-misma cifra de ventas, con-su-misma gama de productos, debe ponerse en marcha y realizar inversiones estratégicas en incrementar su negocio para luego generar eficiencias.

La ventana de oportunidades para realizar una operación corporativa no va a estar siempre abierta, los empresarios saben de los ciclos, saben cuando un comprador con planteamiento razonable puede que no vuelva a pasar…  Si un operador se aproxima con una buena propuesta, considérela.  No siempre hay que abrir un proceso, a veces, quien sabe si vender su empresa al primero que le pasa por esa ventana, es lo mejor que le puede pasar…

Hay que entender las lecciones reales de la crisis, que ha enseñado a muchos grupos empresariales de tamaño medio a estar alerta ante las oportunidades y lejos de relajarse, disponen de mayor confianza y mayor conocimiento de sus fortalezas.

César Parra. Managing Director de Corporate, Strategy & M&A Advisory en los sectores de Consumer & Healthcare