Auditoría & Co

¿Cómo puede responder el sector de la movilidad a la evolución de las expectativas de los consumidores, con el objetivo de influir y liderar una transformación hacia sistemas más limpios, conectados y colaborativos?

En las próximas décadas, el mundo se volverá aún más urbano y con mayor población. El segundo cuarto del siglo XXI estará dominado por la necesidad de reorientar las economías, con el objetivo de que sirvan a más personas, descarbonizar, adaptarse al cambio climático y mejorar la resistencia frente a los virus, las amenazas cibernéticas y otras fuentes de fragilidad.

Los líderes de los sectores público y privado -incluidos los gobiernos locales- se enfrentarán, a su vez, a la forma en que los sectores de la automoción, la industria aeroespacial y el transporte y la logística puedan innovar y crecer ante estos vientos en contra.

La industria de la movilidad está experimentando una gran transformación en las operaciones y la mentalidad. Está pasando del modelo de “huella pesada” del siglo XX, caracterizado por activos físicos, producidos en masa y con gran cantidad de carbono, al modelo de “huella ligera” del siglo XXI, caracterizado por la tecnología y el software de movilidad personalizados y compartibles, junto con sistemas integrados e interconectados.

Las tendencias y los cambios abarcan no sólo el movimiento de personas, sino también de bienes, servicios y datos. Navegar por la tensión y la evolución, tanto de los sistemas heredados como de los emergentes, requerirá agilidad, adaptación y una amplia gama de conocimientos especializados.

Se seguirá produciendo un caluroso debate en toda la industria, preguntándose: ¿Cómo puede responder el sector de la movilidad a la evolución de las expectativas de los consumidores para influir y liderar una transformación hacia sistemas más limpios, conectados y colaborativos?

Para dar sentido al debate, hemos creado una serie de tres artículos interconectados, centrados en aspectos interrelacionados de la transformación de la movilidad.

Categoria

Auditoría General

Fuente: Mazars

Source